Existe una tendencia invasora hacia cualquier síntoma de creatividad: rodear de herramientas plásticas al sujeto creativo para facilitar el uso de pinceles, pinturas, softwares, lienzos… Es una orientación interesante que sin duda favorece muchas habilidades mentales sobre la interpretación de la realidad y el manejo de utensilios, pero es limitada.
Atendemos la creatividad relatada en el ámbito de las artes, pero este talento se extiende a lo largo y ancho de nuestras capacidades.
La creatividad es lo contrario al miedo. La acción frente al bloqueo y la frustración. Es el pensamiento crítico para resolver problemas u obtener soluciones. Hacer visible nuestro pensamiento y orientar nuestros hábitos hacia los fundamentos de la creatividad nos ayuda a tomar decisiones, entendernos y comunicar mejor.